Según cifras del 2022, un 87% de los accionistas evalúan el servicio con nota 6 y 7. Una calificación que, según Juan Carlos Melys, subgerente comercial, “se considera de excelencia”.

DCV Registros recibió una evaluación muy satisfactoria para la calidad de servicio durante 2022. La filial del Depósito Central de Valores (DCV) que administra el registro de accionistas para sociedades anónimas o el registro de aportantes para fondos de inversión.

El promedio ponderado de la evaluación de los distintos canales de atención a accionistas arrojó un 87% de satisfacción con los servicios. “Tener una nota sobre el 80%, es una evaluación que se considera de excelencia a la hora de hablar de los temas de investigación de mercado y calidad de servicio”, señala el subgerente comercial, Juan Carlos Melys.

Estos resultados son el reflejo de la constante búsqueda de mejorar los servicios. Este público es de suma relevancia para la empresa porque los accionistas que se atienden en DCV Registros son los clientes de nuestros clientes, y corresponden a una base mayor a 284.000 personas.

En el año 2022, se recibieron 63.827 consultas a través de los distintos canales de atención: 4.425 clientes asistieron de forma presencial; 32.738 a través de atención telefónica y, 26.664 consultas por correo electrónico. Es relevante destacar que, los accionistas evaluaron la atención de las oficinas con un 99% de notas 6 y 7.

El servicio de administración de registros cerró el año 2022 con 219 sociedades anónimas y 822 fondos de inversión lo que representa un crecimiento de 6,1% respecto de 2021 y un total de 60 nuevos registros administrados.

“Sin duda se ha alcanzado una etapa de madurez en los servicios. Nos sentimos orgullosos de nuestra capacidad para agilizar las operaciones. Con ello, somo capaces de asesorar a nuestros clientes en consultas y requerimientos de los servicios primarios y complementarios asociados, como son los servicios de declaraciones juradas y certificados tributarios”, precisa Melys.

DCV Registros sigue siendo una sociedad catalogada como una empresa de alto estándar. “La empresa está mirando al futuro, adaptándose a la rapidez con la que se mueve el mercado. Estamos abiertos a una transformación, manteniendo siempre el parámetro de cumplir con la seguridad de administrar valores. Y es que la digitalización ira siempre acompañada de una regulación”, agrega.

Desafíos 2023

Durante este año, DCV Registros espera mantener los altos niveles de calidad de los servicios en el manejo de riesgos y costos y, a la vez, adaptarse a los posibles requerimientos de los clientes en aspectos de modernización, en especial en los servicios para las juntas de accionistas.

Adicionalmente, la empresa se propuso atraer nuevos clientes y a la vez mantener a los actuales. “El 70% de las empresas IPSA utiliza nuestro registro de accionistas y aportantes, sin embargo, siempre es bueno poder captar a aquellos que aún no prueban las ventajas de nuestro servicio”, finaliza.

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“La innovación está presente en todos nuestros procesos de desarrollo,  desafiando a los equipos a proponer nuevas formas de brindar soluciones para  los clientes, llevando nuestro negocio al siguiente nivel”.

Guillermo Toro ingresó en 2017 al Depósito Central de Valores (DCV). Su primer cargo fue de Ingeniero de Riesgos TI, para después continuar como subgerente del área de Arquitectura Corporativa, hasta diciembre de 2022, cuando asumió el desafío de liderar la Gerencia de Arquitectura y Desarrollo. “Espero poder aportar con conocimientos y experiencias en el ámbito tecnológico, aplicado al negocio del DCV, que habiliten y contribuyan a su crecimiento”, explica.

¿Qué labores realiza tu área?

La gerencia de Arquitectura y Desarrollo articula requerimientos y necesidades de clientes internos y externos, a través del uso de tecnología, los que posteriormente se transforman en proyectos de desarrollo de software. Es parte de nuestros roles, el cautelar que cada uno de los proyectos que conducimos y desarrollamos, sean coherentes con la visión comercial y de negocio de la compañía.

El proceso de diseño, desarrollo e implementación de soluciones de software está orientado a optimizar el uso de tiempo y recursos, buscando eficiencia en las iteraciones entre la construcción de componentes, las pruebas de validación y aseguramiento de calidad, para finalizar con la puesta en producción. Esto se logra con equipos multidisciplinarios que integran experticias en distintos ámbitos de ejecución de proyectos, para optimizar los tiempos de respuesta de resolución y despliegue de nuevas funcionalidades y servicios que el DCV presta a la industria financiera chilena.  

El proyecto DCV Evolución fue un hito importante para la empresa, pero también para el equipo. ¿Cómo fue para ti este proceso? ¿Qué es lo que principalmente destacas?

Fue un gran reto tecnológicamente hablando, y también un proyecto muy  desafiante en el ámbito laboral y personal , que exigió poner a prueba las mejores competencias y habilidades de todo el equipo. Nos permitió aprender buenas prácticas de la industria financiera, además de ir a la vanguardia de la tecnología, con el apoyo y respaldo de una empresa de clase mundial como Nasdaq.

DCV Evolución es la cúspide del arduo trabajo realizado por todos los equipos que lo conformamos, donde vimos plasmado el resultado de la búsqueda de la eficiencia operativa, a través de la modernización tecnológica.

¿Qué desafíos vislumbras a futuro para el DCV?

El principal desafío en el ámbito tecnológico consiste en mantener a la empresa siempre vigente, con un fuerte enfoque en la optimización de los procesos de negocio, en la reducción del time-to-market y en la ciberseguridad. Y como parte de la búsqueda de estos objetivos, nos hemos propuesto impulsar la adopción de la agilidad, como la nueva forma de interacción entre las distintas gerencias, de forma tal que podamos enfocar nuestros esfuerzos en escuchar a nuestros clientes, reducir el overhead interno y mejorar nuestros tiempos de respuesta en la evaluación y desarrollo de nuevas iniciativas.  

Guillermo Toro es Ingeniero en Sistemas de Computación e Informática de la Universidad de las Américas de Ecuador, en 2012 se radicó en Santiago, donde realizó una Maestría en Tecnologías de la Información (MTI) en la Universidad Técnica Federico Santa María y luego un Master of Engineering Management (MEM) en la Universidad de Los Andes.

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El mercado de capitales es clave para el buen funcionamiento de la economía y el crecimiento del país.

El mercado de capitales es clave para el buen funcionamiento de la economía y el crecimiento del país. En este contexto, el Depósito Central de Valores tiene un rol preponderante ya que custodia los valores que apoyarán proyectos de inversión, planes de ahorro, financiamiento de planes corporativos, los caminos necesarios para crecer y recuperar la confianza.

Un mercado profundo apalanca a la economía en su conjunto, aumentando su eficiencia, la capacidad para estimular el ahorro, inversión y estabilidad, la misma que genera empleos y lleva bienestar financiero a las familias, mejorando la calidad de vida.

Estamos atentos a todos los desafíos que enfrentará este año el mercado de capitales, a quien servimos, confiados en que los avances que logramos en 2022 serán de gran apoyo en este contexto exigente. El año pasado culminamos exitosamente la instalación y puesta en marcha de la nueva plataforma tecnológica de nuestra empresa, el proyecto “DCV Evolución”, que aprovecha la tecnología de Nasdaq CSD (Central Securities Depository) y permite al DCV, operar con un mejor rendimiento, velocidad y escalabilidad, al tiempo que proporciona servicios de custodia y liquidación de valores, a nivel local e internacional.

Estamos preparados para acompañar a nuestros clientes en un incierto 2023, trabajando en relaciones de confianza que nos permitan entender sus necesidades, urgencias y visiones. Custodiamos la confianza de nuestros stakeholders, y nos sentimos llamados a apoyar los esfuerzos e iniciativas para hacer de éste un mercado de capitales cada vez más sólido y profundo.

 Claudio Garín, gerente comercial y experiencia de clientes del Depósito Central de Valores

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Sandra Valenzuela, gerenta de gestión de personas del Depósito Central de Valores, destaca grandes hitos del 2022.

Sin duda el 2022 fue un año desafiante para nuestra empresa. Tuvimos la oportunidad de festejar el éxito de la puesta en marcha de la nueva plataforma para fortalecer el sistema financiero basada en tecnología Nasdaq CSD, de última generación.

El cambio vino a modernizar los servicios, operando con un mejor rendimiento, velocidad y escalabilidad. Asimismo, proporciona servicios de custodia y liquidación de valores a nivel local e internacional, así como mejora servicios en todo el ecosistema financiero chileno.

Este logro representa un trabajo conjunto, dedicado y con un fuerte compromiso por parte del equipo del DCV. Más de medio centenar de colaboradores de distintas áreas y disciplinas se dieron foco en lanzar este proyecto durante tres años; por lo cual nos sentimos orgullosos.

“La transformación es un proceso permanente, que nos acompañará como un aliado de cara al futuro. En esta transformación, estamos convencidos de que las personas son lo más relevante, pues aportan la sostenibilidad en el cambio; al transformar estos avances en parte de la cultura corporativa de nuestra empresa”, expresa la gerenta de personas.

Esta gran innovación, llamada internamente “DCV Evolución” finalizó su instalación durante septiembre. El proyecto es un aporte concreto al avance del desarrollo del mercado de capitales, porque facilita la interconexión con los mercados internacionales e impulsa -en conjunto con otras iniciativas sectoriales- el desarrollo de nuevos servicios de valor agregado.

 La preocupación por la educación financiera

El 42% de los chilenos tiene un bajo nivel de conocimiento financiero; 21% alto y 37% intermedio. Estas preocupantes conclusiones fueron reveladas en la nueva versión del índice de Conocimiento Financiero (ICF), que elaboramos junto a CADEM. ¿Por qué nos importa este tema? “Porque para propósito de avanzar en un mercado de capitales más profundo y conectado con las personas, el grado de conocimiento de la población usuaria es relevante”, destaca. 

Se trata de un desafío país que tomará años cambiar. Y como al DCV lo motiva ser un aporte en el proceso, creó la Mesa de Inclusión y Educación Financiera (MIEF) junto al Centro de Estudios Financieros del ESE Business School de la Universidad de Los Andes.

Este 2023, según los expertos, se viene más bien sombrío en materia económica. Sin embargo, para Valenzuela “ahí nuestra empresa estará aportando para robustecer al mercado financiero como ha sido nuestro compromiso por casi 30 años”.

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