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La ciberseguridad es la protección de activos de información que
aborda las amenazas a la información procesada, almacenada
y transportada digitalmente a través de los sistemas de información interconectados.
“Las personas somos el eslabón más importante en la ciberseguridad de la empresa”. Con esa premisa se trabaja en el Depósito Central de Valores (DCV). La tarea de propiciar seguridad, tanto a los propios colaboradores como al mercado en general, se distribuye en tres áreas estratégicas de la empresa: TI y Ciberseguridad; Riesgo y Gestión de Personas. Esta última, trabaja sistemáticamente para desarrollar una “cultura de ciberconciencia” en cada una de las personas que trabajan en el DCV, tanto internos como externos.
“El rol de los colaboradores del DCV es fundamental para mantener la ciberseguridad de la empresa. Es deber de todos estar atentos a correos sospechosos que pudiesen significar una amenaza para nuestra organización”, sostiene Erika Barrios, jefa de Desarrollo Organizacional y Experiencia Colaborador. Así, desde la gerencia de Gestión de Personas son responsables de modelar creencias, hábitos y conductas; informando, sensibilizando, educando y monitoreando el comportamiento de las personas en materias de ciberseguridad. “La cultura de ciberconciencia, permite proteger a la organización y a los colaboradores; brindando confianza al mercado, de que las personas trabajamos resguardando la información dentro de la compañía”, añade.
El DCV reconoce la seguridad de la información como un atributo necesario para su operación; por ello, se compromete y asigna una alta prioridad al resguardo de los activos de información, mediante el establecimiento de una serie de políticas, procedimientos, estándares y lineamientos que, en su conjunto, aportan a mantener la confidencialidad, integridad y disponibilidad de la información.
Mantenerse como una empresa cibersegura, dado el rol estratégico que cumple el DCV en el funcionamiento del mercado financiero, es crítico. Por lo anterior, trabaja bajo estándares internacionales, como por ejemplo la certificación ISO 27.001 y el Sistema de Gestión de la Seguridad de la Información (SGSI), lo cual brinda mayor confianza a los clientes, respecto del uso y protección que le damos a su información, y en la calidad de los procesos y procedimientos implementados para resguardarla.
