“Debemos consolidar lo que hemos denominado nuestra nueva forma de trabajar”

Sandra Valenzuela, gerente de Gestión de Personas del DCV, repasa en esta entrevista cuáles son los principales desafíos que se avecinan para este 2022, un año que será especialmente importante para la empresa.
En este sentido, la opción por un modelo de trabajo híbrido y el rol de los líderes serán clave.

- ¿Cuáles son los principales desafíos que vislumbra para este 2022?

Son muchos los desafíos, pero en principio, debemos consolidar lo que hemos denominado “nuestra nueva forma de trabajar” y con esto, nos referimos al modelo híbrido de trabajo elegido post pandemia. Esto va a requerir necesariamente redefinir nuestros espacios de trabajo y modificar la forma de trabajar de estos dos últimos años, que respondió de buena manera a la emergencia.

Hoy también nos encontramos en un “proceso de transformación” y como parte de él, debemos ajustarnos a una cultura digital, estableciendo lineamientos claros que faciliten un orden interno y la conciliación vida – trabajo para nuestros colaboradores evitando así, la hiperconectividad de las personas. Otro desafío importante es robustecer el vínculo entre el Depósito Central de Valores (DCV) y sus colaboradores y colaboradoras, bajo este nuevo formato. Debemos potenciar al máximo las instancias de socialización y la comunicación.

- Sobre el trabajo remoto… ¿Cómo se ha logrado mantener la excelencia laboral con esta nueva forma de trabajo que ha implicado la pandemia, donde prima lo remoto?

Creo que mantener a los equipos conectados y motivados fue esencial y en eso, el rol de los líderes fue fundamental. Para eso trabajamos en un programa de liderazgo que abordara la adaptación al nuevo escenario.

El trabajo remoto requirió la correcta gestión y optimización de las herramientas disponibles, el manejo de los tiempos de conexión y desconexión, el desarrollo de la autonomía en la toma de decisiones y la optimización de la comunicación.
Sandra Valenzuela, gerente de Gestión de Personas del DCV

- ¿Cuáles son los grandes cambios que cree traerá esta nueva forma de trabajar?

Esta nueva forma de trabajar ha requerido generar ambientes ciberseguros para el trabajo remoto, contar con herramientas tecnológicas de colaboración que faciliten el trabajo en equipo y permitan aportar mayor valor a la organización y sin duda, la digitalización ha cobrado aún más relevancia.

Por otra parte, para instalar el modelo híbrido de trabajo necesariamente necesitamos contar con espacios físicos mucho más flexibles, que fomenten la colaboración entre colaboradores presenciales y remotos. Otro desafío será la medición de la productividad, así como adaptar los procesos de personas, en torno a la nueva modalidad híbrida de trabajo.

- ¿Cómo ha cambiado la atracción de talento con esta nueva forma de trabajar?

En lo personal creo que este es uno de los grandes desafíos del mercado laboral en general. Pero la atracción de talento no sólo tiene el reto de encontrar personal calificado, sino que también encontrar personas que se ajusten a la cultura organizacional.

Por otra parte, las motivaciones de las personas han cambiado mucho estos últimos años y debemos entenderlas muy bien para poder retenerlos.

- ¿Qué ha significado para el equipo del DCV todos estos años que han trabajo para sacar adelante DCVe?

Ha sido un gran desafío y también un buen aprendizaje. En circunstancias tan adversas como la pandemia y llevando adelante el proyecto DCV Evolución pusimos a prueba el compromiso, la colaboración y las capacidades de todos nosotros.

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